y unos 130 heridos, dijo el miércoles su portavoz, Federico Lombardi.
"El papa fue informado al regresar a su residencia en Sumaré. Se une al dolor de las familias e invita a orar y a vivir en la fe este evento trágico", dijo Lombardi en conferencia de prensa en Rio de Janeiro, donde se encuentra el pontífice.
El siniestro se produjo la víspera del día del Apóstol Santiago, el día grande de la región de Galicia, por lo cual se estima que muchos peregrinos viajaban en el tren.
El accidente tuvo lugar en una curva cerrada cerca de la estación de Santiago de Compostela y las imágenes del siniestro muestran varios vagones volcados sobre un lateral, apoyados contra un talud, mientras una de las locomotoras del convoy tenía su techo incendiado.
De las 222 personas que iban en el tren, 60 murieron en el accidente ferroviario, uno de los peores en la historia de España, según un balance oficial.
Con AFP