el jefe de la diplomacia británica William Hague, precisando que el G8 debatirá la respuesta a la crisis.
La Casa Blanca reconoció el jueves por primera vez que el régimen sirio ha usado armas químicas durante ataques contra rebeldes que han dejado hasta el momento 150 muertos, y afirmó que esos episodios cambian "la ecuación" del presidente Barack Obama.
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Ante esta nueva situación, el Gobierno estadounidense indicó que proporcionará "apoyo militar" a los rebeldes sirios, aunque no habló todavía de entregarles armas.
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Rusia consideró por su parte que las acusaciones de Estados Unidos "no son convincentes", y afirmó que la decisión estadounidense de aumentar la ayuda a los rebeldes "complicará" los esfuerzos de paz, según el asesor diplomático del Kremlin, Yuri Ushakov.
Con EFE
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