A partir de este 13 de Julio de 2017, la Superintendencia de Notariado y Registro asume las tareas de control, inspección y vigilancia sobre las curadurías, en el marco de la Ley 1796 de 2016 conocida como Ley de Vivienda Segura, la cual fue tramitada en el Congreso tras el desplome del edificio Space en Medellín.
Hasta el pasado miércoles, dicha labor estuvo a cargo de los departamentos o secretarías de planeación de cada municipio, pero con la nueva normatividad será la Superintendencia la encargada de fijar las directrices para la creación de un concurso de méritos público y abierto para elegir a los curadores, entre otras facultades.
El proceso de elección será similar al que actualmente se adelanta con los notarios y los registradores de instrumentos públicos, pero serán los alcaldes de cada ciudad los encargados de nombrar a los curadores que quedan en una lista de elegibles, luego de presentar el mencionado concurso.
Otras funciones que asume la Superintendencia
- Tramitar y hacer seguimiento a las peticiones, quejas y reclamos que formulen los usuarios en relación con el servicio de los curadores urbanos.
- Visitas generales y/o especiales a los curadores urbanos, como una medida preventiva, ordenar medidas necesarias para subsanar o prevenir irregularidades o situaciones anormales, entre otras.
El objetivo de esta norma es proteger al comprador de vivienda para incrementar la seguridad de las edificaciones, para fortalecer la función pública que ejercen los curadores, entre otros.
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