¿Alguna vez se han cruzado con un "solapado"? Sylvia Ramírez, Coaching Ejecutivo con PNL (Programación Neurolingüística), le da las indicaciones para conocer el perfil de estas personas, cómo se manejan y además como cuidarnos de ellas.
“Ellos se presentan como víctimas, les encanta parecer las personas dulcecitas, pero no es la única modalidad de presentarse”, dijo.
Agregó que estas personas “tienen ego muy grande, autoestima muy pequeñita, les encanta el poder y al tiempo les da miedo asumir el rol de líder y entonces lo encubren”.
Al parecer de la especialista, al solapado es fundamental confrontarlo porque “se sienten cómodos si están controlando el juego”.
“El tip más ingenioso es confrontarlo y decirle ya entendí cuál es su juego. No soportan la confrontación”, dijo.
Agregó que un solapado siempre dicen cosas ambiguas: “Sugiere cositas sueltas, el lenguaje es siempre ambiguo, tienden a hacer generalizaciones y a hacer siempre de víctimas”.
Además, dijo que “el mono sabe en qué palo trepa” y que para evitar que el solapado llegue a cumplir su plan es necesario “asumir el rol de líder”.