La oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios advirtió que la región del Catatumbo, en Norte de Santander, sigue sufriendo el impacto de la guerra constante a pesar del cese al fuego unilateral decretado por las Farc.
Según un informe de la agencia conocido por Blu Radio en 2015, más de 500 personas fueron desplazadas por la fuerza en eventos masivos causados ??por el combate de las guerrillas del ELN y EPL y el Ejército.
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Además, cerca de 24.000 personas han sufrido limitaciones de movimiento y han visto restringido el acceso a bienes y servicios debido al conflicto armado. La mayoría de ellas han sufrido limitaciones en el acceso a agua potable, debido a los frecuentes ataques contra oleoductos e infraestructura.
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La oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios también reveló que en lo corrido del año seis personas fueron secuestradas y ocho heridos en combates en el Catatumbo.
Así mismo, el organismo ha expresado gran inquietud por la persistencia del reclutamiento y utilización de niños, niñas y adolescentes en el conflicto.
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“En Catatumbo, la violencia es continua, pero sutil y difícil de controlar. Solo es visible cuando el equilibrio de control territorial está amenazada. Las comunidades locales viven con el temor de sufrir consecuencias si deben violar las reglas impuestas por los grupos armados presentes”, dice el informe.
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La agencia de las Naciones Unidas también destacó que un eventual acuerdo de paz entre el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las Farc llevaría a contribuir en la eliminación de la práctica de minas antipersona, cuyo uso indiscriminado está poniendo a generaciones enteras en riesgo.
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