Las autoridades de Barrancabermeja, Santander, controlaron a la emergencia presentada por la ruptura de tubos que transportan petrólero.
Los hechos se presentaron en las calles del barrio Codiva, donde broto de la tierra gran cantidad de combustible no refinado, generando olores ofensivos y peligro para las personas que viven en el sector.
“Es la tercera vez en 35 años que se presenta esta situación, hay tuberías por donde se transporta petróleo y sus derivados enterradas que no sabemos cómo están, vivemos en una zona de alto riesgo, esto en cualquier momento podría explotar”, manifestó Johnson Méndez, líder comunal del barrio Codiva.
Las autoridades ambientales junto con las empresas contratistas de Ecopetrol, acordonaron la zona para iniciar los trabajos de reparación de las tuberías.