El fiscal general, Francisco Barbosa, explicó que en medio de una investigación que lleva la Fiscalía desde el 2015 por el homicidio de Óscar Eduardo Rodríguez Pomar, hijo de un sastre en Barranquilla, fue interceptado el teléfono del ganadero José Hernández Aponte, más conocido como el ‘Ñeñe’,asesinado el año pasado en Brasil en un atraco.
Sin embargo, fue hasta el 2019 que se conoció un informe de la policía judicial en el que transcribían la interceptación. No obstante, el fiscal del caso no trasladó copias a las autoridades pertinentes teniendo en cuenta que se hablaba de supuesta corrupción en campañas electorales y mencionaba nombres como "Vargas Lleras, Uribe e Iván".
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“El informe de fecha 28 de agosto del 2019 se conoció la transcripción de una interceptación de comunicaciones hecha a un número telefónico vinculado por el homicidio de Rodríguez Parra. Al conocer el contenido de la comunicación mencionada, el fiscal del caso, dentro de su autonomía, no compulsó copias porque consideró que la información no aportaba al esclarecimiento de ese crimen”, dijo Barbosa.
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No obstante, anunció que, aunque en la administración pasada no compulsaron copias su administración sí lo hará.
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“Pese a que esta situación se presentó en la administración del doctor Fabio Espitia, fiscal general encargado, esta Fiscalía compulsará copias a las autoridades competentes para los fines competentes”, concluyó.
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