función cardiaca, reducir el riesgo de infarto y prevenir enfermedades como la diabetes y la osteoporosis.
El estudio estableció que la cerveza puede contribuir a la recuperación de pacientes que han sufrido infartos y aclaró que la bebida no produce sobrepeso, pues es superada en calorías por la leche, el zumo de manzana y el vino.