El cierre de la carretera entre Bucaramanga y San Gil ha provocado el aumento hasta en un 6% del precio del galón combustible en la zona turística de Santander.
El precio del galón de gasolina estaba en $9.500 y ahora se vende a $10.100, y el costo del galón de Acpm pasó de $.9.200 a $9.800.
“Con este cierre de la vía, las estaciones de servicio de San Gil y municipios aledaños tienen que cargar el combustible en las plantas de Facatativá, Cundinamarca, lo cual significa más costos en el transporte del flete, eso se tiene que reflejar en el valor final que debe pagar el usuario por galón combustible”, aseguró Farid Jones, presidente de Febecol.
Los transportadores piden al Gobierno Nacional que se habilite un subsidio de combustible para que se mitigue el impacto por el cierre de la vía en Piedecuesta.