La médica alemana, Giulia Enders, publicó un libro titulado ‘Le charme discret de l'intestin’ (El discreto encanto del intestino) en el que enseña la mejor manera de sentarse en un inodoro a hacer las necesidades fisiológicas.
Según explica la doctora, hay posiciones adecuadas para que el intestino grueso pueda desechar lo necesario (Lea también: Hombre sería enviado a la cárcel dos años por espiar el celular de su esposa).
En el libro, en el Top 5 de los más vendidos en países europeos como Alemania, Francia e Italia, narra que la acostumbrada manera de sentarse sobre el inodoro es una de las principales casa de hemorroides, pues la posición de las piernas impide que los músculos no se relajen y dificulten la salida de la materia fecal.
Explica que actualmente en el planeta hay, por lo menos 1.200 millones de personas que no usan el inodoro sino que hacen sus necesidades en cuclillas, de tal manera que las rodillas lleguen a la parte superior del tronco (Lea también: Ladrón robó a taxista y sin percatarse dejó billetera en el vehículo).
“Las hemorroides, los trastornos intestinales como la diverticulitis o el estreñimiento sólo existen en países donde se evacua sentado en un inodoro”, escribe Enders.
Incluso, advierte que aguantarse las ganas de entrar al baño también es consecuencia de producir obstrucciones en el organismo (Lea también: El tuit que le costó un contrato a un jugador en España).
Por tal motivo, la médica y escritora asegura que sentarse en el inodoro elevando las piernas y poniéndolas sobre un taburete evitará varias enfermedades.
Foto tomada del libro L'intestino felice de Giulia Enders
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