El estado mexicano de Tabasco lanzó una alerta al detectar en las redes sociales un reto que incita a bañarse con gasolina y prenderse fuego en alusión a la explosión que dejó 115 muertos en la comunidad de Tlahuelilpan el pasado 18 de enero.
“El reto más que incitar a lesiones hace referencia a una burla a la sensibilidad de gente que sufrió en la explosión de Tlahuelilpan, estado de Hidalgo”, dijo Ofelia Sánchez, titular de la Unidad de Delitos Informáticos (UDDI) del estado mexicano de Tabasco.
El llamado "Reto Huachicol" fue detectado este fin de semana en las redes sociales con la etiqueta #HuachicolChallenge y la UDDI decidió a lanzar una alerta por considerar que se incita a los jóvenes a inmolarse con gasolina.
En el estado de Tabasco, en el sureste de México, no se ha recibido ningún reporte de que este reto se haya cumplido, señalaron las autoridades.
En el estado mexicano de Oaxaca se ha observado en las fiestas de carnaval a personas disfrazados de quemados, mientras que en redes sociales ya se venden por 26,2 dólares muñecos carbonizados con un bidón en mano.
En Twitter y en Facebook circulan videos de este reto que reflejan "la ignorancia e irresponsabilidad de los jóvenes que buscan hacerse famosos en redes sociales", señaló Sánchez.
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La funcionaria pidió a la sociedad, a los padres de familia y a los jóvenes ser conscientes, sensibles y racionales para evitar suicidios colectivos.
"Ha sido muy mencionado y compartido, eso es de mucha preocupación para la fiscalía. Nuestra intención es prevenir y evitarlo", justificó.
El especialista en redes sociales, Orlando Guzmán, considera que los riesgos en este juego mortal son altos y van desde lesionarse hasta quitarse la vida.
Puntualizó que este complejo comportamiento psicosocial de la juventud mexicana surge de un "ambiente de inestabilidad", que se detona ante problemas por "la desintegración familiar y la pobreza que los rodea".
A algunos mexicanos "este tipo de juegos les causa mucha gracia, no les da remordimiento por la insensibilidad respecto al suicidio. Un sector grande de la población lo acepta, tiende a imitarlo y transmitirlo por diversas vías", explicó.