los medios locales.
"Los dos niños abandonaron su colegio en Magnitogorsk (...) por un pequeño túnel que habían cavado debajo del establecimiento durante varios días con palas para niños" según la edición local del diario popular Komsomolskaia Pravda.
Los fugitivos caminaron un par de kilómetros hasta un concesionario de coches de lujo, donde pensaban comprar un Jaguar, según esta fuente.
Una mujer sospechó al ver a los dos niños deambulando frente al concesionario y les preguntó lo que hacían. "Los dos explicaron que se habían ido de su escuela para comprarse un gran automóvil, pero que no tenían dinero" relata el diario.
La mujer los llevó entonces a una comisaría, que ya había sido alertada de su desaparición por las directivas del colegio.