En un artículo publicado por el portal BBC, se hace referencia a un análisis del Centro de Ecología de Míchigan, EE.UU., el cual reveló que el aroma del vehículo cuando aún no ha sido usado se debe a la gran variedad de productos químicos que se han utilizado en su ensamblaje, los mismos que pueden representar riesgos para la salud.
Disolventes, adhesivos, plásticos, cauchos y otros materiales pueden contener orgánicos volátiles, lo que puede llegar a causar trastornos hormonales y reproductivos, dañar el hígado, los riñones y el sistema nervioso central, e incluso provocar cáncer, advirtió la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos.
Publicidad
"Es un cóctel químico formado por una gran cantidad de toxinas", señaló Jeff Gearhart, director de investigación del Centro de Ecología de Míchigan, EE.UU. al portal BBC.
Publicidad
Al respecto, algunas marcas consultadas por ese medio indicaron que han logrado una disminución del uso de esos materiales, en especial del policloruro de vinilo (PVC), un importante carcinógeno.
Esas compañías han decidido incluir otro tipo de productos, materiales y materias primas a los elementos que componen los automóviles que están listos para salir al mercado.