para alcanzar el mayor bien: Dios y la vida eterna”.
El padre Quiroga explica que hay una gran recompensa cuando se sigue este camino, pues “Cuando conocemos a Jesús todo es transformado. Todo cambia cuando conocemos su amor y su entrega. Lo más lindo de caminar con él es que nuestra vida se convierte en algo muy bonito para nosotros y para los demás”.