Hasta una casa del corregimiento El Mellito, del municipio de Necoclí, llegó la Policía de Infancia para rescatar a un menor de ocho años quien era encadenado por su padre en la humilde vivienda.
Después de un proceso de verificación, se comprobó que el niño, con discapacidad auditiva, no tenía síntomas de maltrato y abuso.
El menor era encadenado por su padre, un campesino de 76 años de edad, para evitar que se fugara por los pastizales donde han detectado la presencia de animales salvajes, según confirmó Susana Torres Mejía, comisaria de Familia de Necoclí.
“El señor algunas veces opta por encadenar a su hijo para protegerlo de animales salvajes ya que, en el lugar, los habitantes han visto y conocen de la existencia de tigres, leones y serpientes”, precisó.
Después de hacer el restablecimiento de derechos, por parte de personal del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, la Comisaría definió dejar en custodia de un familiar el menor, toda vez que su padre alegó tener que salir a trabajar y no poder hacerse cargo de su hijo.
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