Policía no descarta autosecuestro del capitán Ányelo Palacios

El director de la Policía reveló que actualmente se encuentran realizando todas las investigaciones del caso para saber “cuáles fueron los móviles, por qué se llevó cabo, quiénes fueron los autores y cómo se dio la fuga del capitán”. (Lea también: Apareció el capitán Ányelo Palacios). Afirmó que se están “estudiando todas las hipótesis (incluida la del autosecuestro) porque no vamos descartar nada, estamos usando todos los detalles del caso para poder aclararlo”. Dijo que los investigadores se encuentran analizando todos los datos entregados por la familia, las autoridades, testigos y la versión del capitán, una vez sea dado de alta, “para poder entregar una respuesta satisfactoria”. Palacios, quien denunció la existencia de una red de prostitución masculina en la policía hace varias semanas, había sido reportado como desaparecido, luego de haber sido interceptado la noche del sábado por cuatro hombres que se movilizaban en motocicletas "por la vía que de Cúcuta conduce a Pamplona, Norte de Santander”. El general Nieto reveló que se dispuso de “toda la capacidad para encontrar al capitán y anoche llamaron a la familia del uniformado a decirle que estaba allí, que se había escapado y lo llevamos a un centro asistencial porque algunos signos de hipotermia”. Este lunes se conocieron fotos en las que aparece el capitán de la Policía Ányelo Palacios descansando en una vivienda, luego de aparentemente escapar de sus secuestradores. (Lea también: Revelan fotos de capitán Ányelo Palacios tras aparecer en finca de Ragonvalia). Las fotos fueron tomadas en la vereda Caliches, jurisdicción del municipio de Ragonvalia, según relatan los dueños de la casa. El capitán, al parecer, se fugó de los captores y llegó a una residencia donde le brindaron ayuda. Sobre la protección al capitán Palacios, el general Nieto afirmó que se encontraban esperando que volviera de un permiso “para poder activar el esquema ya que hace poco se había hecho la solicitud”. Palacios viajaba en un automóvil particular en compañía de su padrastro, Arcilio Ortiz Valero, de 76 años, quien fue abandonado por los plagiarios que se llevaron a Palacios con rumbo desconocido. El capitán reveló la existencia de una red de prostitución en la policía en la que estarían involucrados varios oficiales, lo que desató un escándalo que afectó al entonces director de la institución, general Rodolfo Palomino.