Pasajeros del Metro de Medellín vivieron momentos de pánico cuando uno de los vagones que cubría la ruta Niquía – La Estrella fue impactado al parecer por un objeto contundente.
Mauricio Soto, jefe de investigación, desarrollo e innovación del Metro,rechazó este acto de vandalismo que no dejó personas heridas.
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“Si se nos detiene un tren por cualquier razón o por una mala acción de una persona, afecta a toda la cadena del servicio, entonces se perjudican muchísimas personas. Solo el cambio de un vidrio puede costar unos 20 millones pesos” aseguró.
Debido al fuerte impacto, el vagón tuvo que ser enviado a los patios ubicados en Bello para ser reparado y mientras tanto, las autoridades investigan lo ocurrido.