La Federación Nacional de Comerciantes reportó pérdidas históricas en el comercio en Bogotá durante el primer fin de semana con pico y placa por la alerta naranja y amarilla debido a la calidad del aire en la ciudad.
Según el director ejecutivo de Fenalco Bogotá, Juan Esteban Orrego, "el 88% de los comerciantes encuestados aseguró que sus ventas durante el fin de semana cayeron drásticamente tras la sorpresiva medida de pico y placa por emergencia ambiental. En promedio hubo una disminución del 45%".
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Los más afectados son el sector turístico, los restaurantes, los centros comerciales (sobre todo los que están ubicados en las afueras de la ciudad), los parques automotores, los parques recreacionales y centros de diversiones. En total estos sectores reportan una disminución en sus ventas superiores al 80%.
El tema es tan delicado que, de continuar esta medida, según Orrego, se estaría hablando de despidos.
"El 48% de ellos tiene que entrar a hacer despidos porque físicamente no tendrían cómo mantenerlos e inclusive algunos establecimientos comerciales nos anuncian que tendrían que cerrar porque no podrían continuar en el negocio", dijo.
El balance no es satisfactorio, Fenalco asegura que incluso la mitad de los establecimientos que realizan domicilios indicaron que este servicio disminuyó en promedio 60%.