Las extorsiones se volvieron una migraña para las autoridades de Barranquilla y su área metropolitana, una que se dispara mes a mes y que se afianza en golpear al sector transportador y tendero.
El reciente paro de conductores de bus, originado a partir de tres asesinatos que la banda Los Rastrojos Costeños, cometieron para presionar pago de vacunas, es el reflejo de un panorama de presión generalizado.
De acuerdo con el observatorio de Seguridad Ciudadana de la Universidad del Norte, en Barranquilla se han incrementado los casos reportados hasta en un 55% en el primer semestre de este año, frente al mismo periodo de 2021.
Sin embargo, las campanas de alarma suenan fuerte en Soledad y Malambo, donde el incremento es del 200% y 400%, respectivamente.
Tenderos y conductores terminaron abrazados por el golpe del mismo flagelo. Uno que en el último mes ha llevado al cierre de cinco tiendas solo en el barrio Chiquinquirá, ubicado al suroccidente de la ciudad, donde el comerciante se rinde bajando la estera para nunca más levantarla. Orlando Jiménez, presidente de Undeco.
Este paro de conductores ha sido de doble filo para la economía local, pues no solo pierde el trabajador que no sale de casa, sino también el comerciante que no recibe clientes: por lo menos se calculan más de $6.500 millones en pérdidas por la parálisis de las últimas horas que ha golpeado a cerca del 70% del comercio de la ciudad, según cifras de Fenalco.
Mientras las autoridades trabajan con el refuerzo de la seguridad y la entrega de recompensas hasta por 100 millones de pesos, los afectados piden celeridad en las capturas y las investigaciones.
¿Qué dicen los comerciantes?
Los comerciantes de Undeco aseguran que las extorsiones no sólo paralizan a transportadores, sino también a tenderos. Ellos se han solidarizado con los conductores y aseguran que ellos saben lo que es vivir el flagelo de la extorsión. Hay cinco tiendas cerradas en el barrio Chiquinquirá por extorsión.
Cierre de tiendas en Barranquilla
Solo en un barrio de Barranquilla han cerrado cinco tiendas en las últimas semanas porque la situación de inseguridad es incontenible.
La semana pasada, en la carrera 33 con calle 43, una tuvo que cerrar, no soportaron más la presión. A una cuadra de allí hay otra tienda cerrada. Por el sector de la carrera 32 otra tienda cerró hace un mes.
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