En el #HiloHJCK esta es la historia de Agnes Sampson, quien fue una curandera escocesa ❤️🔥, acusada de brujería en el marco de los juicios de brujas de North Berwick, hacia el final del siglo XVI. Sampson, entonces una mujer mayor y respetada, fue acusada de brujería por Gillis Duncan, una empleada doméstica de Tranent obligada por su patrón a denunciar sus supuestos nexos con la brujería y que, bajo tortura, había dado los nombres de supuestos cómplices. 🔥Sampson fue llevada al palacio de Holyrood ante el rey y un consejo de nobles y al principio se negó a confesar. Entonces la raparon y la ataron a la pared de su celda con una "brida de bruja", un instrumento de hierro con cuatro dientes afilados colocado en la boca, dos de los cuales presionaban contra las mejillas y otros dos contra la lengua, impidiendo cualquier movimiento de la boca y el habla.
No es posible reconstruir sin huecos el desarrollo del joven Ludwig van Beethoven en la segunda mitad de los años 80: muchas obras se han conservado de forma fragmentaria, y otras se han perdido totalmente.
En ausencia de una historia sobre las Romanzas resulta tentador especular que las romanzas se concibieron para conciertos de violín que nunca llegaron a ver la luz: entre los posibles modelos se hallan los movimientos lentos de los conciertos para piano, K-466 titulado “Romance” y K-491 de Mozart que Beethoven conocía a la perfección.
El Rondó para piano y orquesta en si bemol mayor, que escucharemos para comenzar este capítulo, al igual que muchas otras obras de Beethoven como el concierto para violín en do mayor no se conserva copiado en todas sus partes. Fue editado póstumamente en 1829, una vez que el antiguo alumno de Beethoven Carl Czerny hubo completado la parte de piano y la partitura de orquesta.