Leer a Luis Miguel Rivas es muy similar a comerse una trufita de chocolate, uno sabe que le espera algo en lo que el placer será el protagonista, pero no sabe en qué mordisco sucederá. La literatura de Rivas, atravesada por el lenguaje del barrio, de Medellín, tiene la consideración de un narrador que pese a que no lo ve todo, siempre está abierto para el lector. No es un espejo, sin embargo. Una ciudad que parece estancada en el tiempo y que escupe los últimos resquicios donde habita la ternura, la amistad y la belleza. En esta conversación con Luis Miguel, él en Buenos Aires y yo en Bogotá, hablamos sobre la poesía y el amor; acerca de esa fuerza demoledora que es la de escribir y sobre todo, sobre los amigos.
Por años Adriana Pombo recorrió de punta a punta Colombia. Trabajaba con una ONG dedicada a brindarles herramientas a las comunidades más vulnerables del país. En uno de sus viajes la violaron varios hombres y su vida se partió en dos.
Catalina Gallo y Maribel Abello se conocieron en la universidad. Las dos tomaron caminos muy distintos, el periodismo y la actuación respectivamente, pero durante años llevaron sus vidas en medio de una enfermedad mental que padecen millones de personas en el mundo: el trastorno bipolar.
Juan Sebastián Buitrago llegó por un golpe del azar a las casas de apuestas online. Le ganó la curiosidad por meter algunos pesos en partidos de fútbol y muy rápidamente eso se convirtió en una adicción que por poco lo llevó a perder la vida.
Pirry tuvo durante años varios programas de televisión que fueron muy exitosos. Recorrió medio mundo, conoció desierto y selvas y los 7 mares sin olvidar nuestra propia realidad.