Leímos la Carta número 13 que Emma Reyes le envió desde parís a su amigo e historiador Germán Arciniegas. En esta carta, parte del libro Memoria por correspondencia (Laguna Libros), Reyes cuenta cómo la religión y la imagen del diablo se inoculó en su corazón, cómo de formas íntimas en insospechadas el convento donde se crió fracturó su espíritu para siempre.
El Gobierno nacional aún no ha convocado una mesa de diálogo con los líderes del paro arrocero, a pesar de los bloqueos activos que persisten en al menos ocho departamentos del país.