Una vez más fue vivaldi quien asentó el estándar de oro. En el inicio de uno de sus conciertos de su colección mas vendida, publicada en 1711, desvergonzadamente titulada “l” Estro armónico o “inspiración armónica” Vivaldi nos transporta a través de un fascinante e intrigante viaje de acordes solos. Esta es su historia.
En una FILBo dedicada al cuerpo, pocas celebraciones resultan tan significativas como el homenaje a Darío Jaramillo Agudelo, cuya trayectoria poética y narrativa ha sido reconocida con numerosos premios y distinciones. Su obra, profundamente vinculada al amor, el erotismo y la experiencia corporal, es fundamental para entender la tradición poética colombiana. Como afirma el poeta Ramón Cote, existen muchos Daríos: el poeta, el narrador, el ensayista, el editor, el gestor cultural. A esa lista se suman el mentor, el antologador, el reseñista, el melómano y el amigo entrañable. En este homenaje, amigos y colegas se reúnen para conversar, ante un público fervoroso, sobre las múltiples y brillantes facetas de su vida y su obra.