La mesa está servida. Los 'tiburones' del Junior pretenden devorar en casa a un convaleciente Colón de Argentina este miércoles en los octavos de final de la Copa Sudamericana-2018.
El partido de ida de esta llave de octavos se disputará a las 7:15 de la noche en el
Estadio Metropolitano Roberto Meléndez de Barranquilla.
El ganador de la serie se enfrentará al vencedor de la que disputan los argentinos
Banfield y Defensa y Justicia. El Junior llega con ánimo renovado tras vencer 3-1 a
La Equidad el sábado en el campeonato local, donde marcha en el quinto lugar.
Y aunque siempre suele privilegiarse el resultado sobre el juego,
al Junior le ha sobrado fútbol pero le ha faltado gol, un déficit que espera terminar de corregir ante los argentinos. "En todas partes hablan de que Junior juega bien al fútbol, que agrada a locales (pero
) a veces nos ha estado faltando pegada", reconoció el director técnico Julio Comesaña. Frente a Lanús la falta de puntería del equipo barranquillero casi le cuesta la clasificación a octavos de final,
pese a las numerosas ocasiones de las que dispuso antes de definir el pase 3-2 en la tanda de penaltis. Para esta temporada, el Junior perdió a su extremo Yimmi Chará, traspasado en junio al Atlético Mineiro,
lo que ha debilitado su poder ofensivo. Tras la salida de Chará, Comesaña apuesta por la estrella que le queda, el delantero Teófilo Gutiérrez,
quien militó con River y Rosario Central en el fútbol argentino antes de volver al conjunto de Barranquilla, pero sobre todo por el buen momento de Luis Díaz.
Este ha respondido con creces a la expectativa. Con seis goles,
es el máximo artillero del torneo Clausura y ha formado parte de las últimas convocatorias de la selección cafetera. "Colón nos merece el mayor respeto porque tiene una historia, porque es un equipo guerrero (...)
pero nosotros no tenemos temor de nadie", advirtió a la prensa Comesaña.
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Aunque cuenta con su as goleador,
el estratega tiene algunas alternativas en remojo. El atacante Iván Rivas, solicitado por el propio Comesaña,
no ha podido acumular tiempo de juego por un exceso de peso y dificultades de adaptación. Tampoco Fabián Sambueza,
el mediocampista ofensivo, ha logrado consolidarse en la titular. El equipo visitante, que dejó por el camino al venezolano Zamora y al poderoso Sao Paulo,
enfrenta serias dificultades en la liga argentina. Con una sola victoria en seis encuentros, y un saldo en rojo de ocho goles recibidos,
marcha en el puesto 19. Sin embargo, el sabalero todavía vive del crédito de su sonada victoria ante el favorito Sao Paulo en la pasada ronda,
en la tanda de penales. Aunque se encuentra convaleciente, su reciente victoria 3-1 frente a Godoy Cruz,
el fin de semana en el campeonato argentino, podría darle ánimos para seguir avanzando en su gesta continental. El técnico Eduardo Domínguez deberá recomponer el equipo tras las bajas por lesión del delantero Javier Correa y del defensa Guillermo Ortiz, quienes estuvieron en el juego frente a los brasileños.
Aun así, el técnico esperará hasta último minuto por una posible recuperación de su zaguero. Frente al Junior, Domínguez podría volver a montar una línea defensiva de cinco,
una fórmula que le permitió forzar la definición desde los 12 pasos en la pasada ronda. 
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