Cuatro cocodrilos del Orinoco o caimán llanero, liberados en el Meta

Luego de dos años de permanecer en un programa de conservación en la Estación de Biología Tropical Roberto Franco de la Universidad Nacional en Villavicencio, fueron liberados a la vida silvestre 4 ejemplares de caimán del Orinoco. En la estación biológica se simuló su hábitat natural, crecieron hasta alcanzar los dos metros y pesaron 150 kilogramos, para luego ser liberados a la naturaleza. Para Carlos Lasso, investigador experto del Instituto Humboldt, institución que invirtió recursos y aportó al proceso investigativo, “el caimán llanero es quizá el caimán más grande del mundo y es una de las especies más amenazadas a nivel global, categorizada en peligro crítico de extinción según la Unión Internacional de la Naturaleza, empeorando su situación, es por esto que esas medidas de conservación garantiza la existencia de la especie”. De acuerdo a lo dicho por el investigador a Blu Verde, es una especie endémica, es decir, que sólo habita en la cuenca del Orinoco y su especie se ha visto diezmada por la explotación por la piel desde el siglo pasado. Según el experto, el caimán es un depredador que integra la cadena alimentaria en los ecosistemas acuáticos, humedales de la Orinoquia, se alimenta de peces, sus heces fecales fertilizan los cuerpos de agua y de por si es emblemática y forma parte de la idiosincrasia venezolana y colombiana. Para el investigador a partir de esta iniciativa de la Universidad Nacional apoyada por Cormacarena y el Instituto Humboldt, se han definido estrategias para conservar la especie y una de ellas es el repoblamiento en los ríos Guayabero, en donde hay una población pequeña y lo que se quiere es monitorear cómo interactúan esos individuos nuevos con los viejos y con la población local de pescadores y campesinos.