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Se abre una luz de esperanza para la familia de la monja colombiana Gloria Cecilia Narváez, luego de que se conociera que El grupo JNIM, vinculado a Al Qaeda, que la tiene en su poder desde febrero de 2017, acordara liberar a algunos rehenes a cambio de que cerca de 180 yihadistas fueran puestos en libertad, proceso que comenzó el pasado fin de semana.
El JNIM o Frente de Apoyo para el Islam y los Musulmanes, liberaría primero a la ciudadana francesa Sophie Petronin, secuestrada el 24 de diciembre de 2016 en Gao, y también al líder opositor de Malí, Soumaila Cissé, retenido hace seis meses.
Tanto Petronin, de 75 años, como Cissé, de 70, ya habrían sido entregados, según medios locales.
Con esta liberación, se abriría la posibilidad para que la hermana Cecilia Narváez y otros seis secuestrados también pudieran ser liberados, aunque el grupo yihadista no lo ha confirmado.
Junto a Narvaez, el JNIM mantiene secuestrados a los italianos Pierluigi Maccalli y Nicola Ciacco; al médico australiano Ken Elliott, al ciudadano sudafricano Christo Bothma, a la ciudadana suiza Beatrice Stockly y la ciudadana rumana Julian Ghergut.
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Para algunos expertos, la menor sospecha ante alguna inconsistencia que pueda tener el acuerdo entre las autoridades de Mali y los Yihadistas, frenaría las operaciones de liberación.
También surgen interrogantes sobre si los rehenes no permanecían juntos y están en diferentes lugares o si hay problemas de logística para los traslados.
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