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La Gobernación de Santander activó un plan especial de atención médica para los ciudadanos migrantes que viven en Bucaramanga, luego que el Instituto de Salud Municipal- ISABU- anunciara que suspendió toda clase de atención médica a venezolanos en el Hospital del norte y los puestos de salud.
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“De forma unilateral y sin previa consulta fue suspendida la atención a las personas provenientes de Venezuela en la red pública de salud de Bucaramanga, por eso se ha definido un plan de respuesta sobre la atención básica de salud que estas personas merecen y deben recibir, al tratarse de un derecho fundamental, que incluye el apoyo del Estado, así como de los cooperantes”, manifestó Álvaro Clavijo, secretario de Salud (e) de Santander.
Ante la crisis que puede afrontar la población venezolana por falta de atención básica en salud en Bucaramanga, la Gobernación de Santander ordenó que los migrantes sean atendidos en los hospitales San Juan de Dios, de Floridablanca y Girón, junto con el Hospital Universitario de Santander.
El departamento ha recibido dos asignaciones que suman más de $1.400 millones, de los cuales $700 millones ya fueron pagados frente a una facturación por atenciones a venezolanos, que sobrepasa los 12.000 millones de pesos.
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