Coronel del Ejército intimida a sus subalternos con bajarles el sueldo en cuarentena

En audio quedó registrada la indignante reacción del coronel Armando Ortiz, quien estaría a cargo del Batallón de Policía Militar No. 2 en Barranquilla, Atlántico, luego de que por llamada telefónica intimidara a uno de sus subalternos, advirtiéndole que si no se presentaba en la instalación militar, le iban a deducir su sueldo en medio de la crisis económica por la que atraviesa el país en tiempos de pandemia.El problema es que el uniformado que recibió dicha orden vive al otro lado de Barranquilla, específicamente en un departamento que limita con Venezuela y, según expresa en el audio, no tiene ningún medio de transporte para desplazarse hasta la capital del Atlántico, además, aseguró que no había encontrado servicio de buses debido al aislamiento obligatorio decretado por el Gobierno.Le puede interesar: Tino Asprilla busca a vendedora de pescado que desesperada se lamenta de su situaciónFrente a esta novedad, el coronel Ortiz le respondió al soldado: “eso ya es un problema que es muy suyo, si usted quiere venir a trabajar, si usted quiere que le llegue pago el próximo mes, porque si no van a venir a trabajar pues toca deducirlo y eso es lo que queremos evitar”.Ante esta respuesta, el soldado le insistió al coronel Armando Ortiz que ni siquiera tiene un medio de transporte propio para poder movilizarse. “Yo entiendo que usted es nuevo y no entiende cómo son las órdenes todavía en el Ejército, pero pues uno trata de cumplirlas a cabalidad”, le respondió el coronel.¿Qué dice el Ejército frente a la actuación del teniente coronel Jorge Armando Ortiz Toro?BLU Radio contactó al coronel Juan Carlos Aparicio, comandante de la Segunda Brigada del Ejército, quien informó que el oficial implicado en esta controversia malinterpretó una orden que se le dio y la cual estaba enfocada en ubicar a los soldados que estaban por fuera para coordinar medios de transporte que los trasladara hasta Barranquilla.“Paralelo a esto se están reuniendo informes para realizar una investigación disciplinaría, con el fin de verificar si hay méritos para tomar la acción correctiva”, dijo el coronel Juan Carlos Aparicio, comandante de la Segunda Brigada del Ejército.Finalmente, el oficial explicó que tuvieron que volver a llamar a todos los soldados para enviarles el mensaje correcto, pues la orden era sacar una base de datos para conocer la ubicación de cada uno y posiblemente planear un movimiento de personal.