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Estos son los siete hallazgos de la Contraloría en construcción del puente Pumarejo

El ente de control cuestionó el otrosí para un arbitraje de solución de conflictos y encontró irregularidades en la labor del Invías.

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BLU Radio // Puente Pumarejo // Foto: suministrada

La Contraloría General de la República encontró siete hallazgos administrativos en los contratos de construcción e interventoría del nuevo puente Pumarejo, de los cuales tres tienen presunta incidencia disciplinaria.

Como resultado de la auditoría realizada, la Contraloría considera que el cumplimiento de la gestión fiscal del Instituto Nacional de Vías (Invías) a los contratos 0642 y 0644 de 2015 presentó "debilidades presupuestales y de planeación como resultado de la falta de previsión de hechos o circunstancias inherentes o atribuibles con la ejecución de obras de infraestructura relacionadas a proyectos de importancia estratégica para el país".

El puente Pumarejo tuvo un costo final de 800.000 millones de pesos, cuando el presupuesto original era de 614 mil millones.

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El primer hallazgo es la suscripción del otrosí modificatorio al contrato de obra 0642 de 2015. Mediante oficio de 22 de noviembre de 2019, el representante legal de SES Magdalena (contratista) le propuso al Invías incluir una cláusula compromisoria y que, mediante un mecanismo alternativo de solución de conflictos, se resolvieran 18 divergencias.

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De acuerdo con el órgano de control, la inclusión de esta cláusula no era conveniente ad portas de la terminación del plazo contractual por cuanto el procedimiento arbitral podría ser mucho más oneroso para el Invías.

El segundo hallazgo consiste en que 67 de los 175 ítems requeridos para la ejecución del proyecto fueron ofertados por un valor inferior al referido en los pliegos y los restantes ítems se ofrecieron al precio máximo del presupuesto oficial.

Según la Contraloría, esta situación da origen a un hallazgo administrativo, ya que al presentar el presupuesto oficial en los pliegos de condiciones facilita, eventualmente, que las obras se paguen a un precio mayor que el que se puede obtener con una competencia por el precio.

El tercer hallazgo es el efecto económico del cambio de norma sísmica de diseño de puentes en el país, ya que la construcción coincidió con esta modificación.

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Para la Contraloría "es evidente que desde el comienzo de la estructuración de la licitación para el puente Pumarejo se identificaba la necesidad de ajustar el diseño, el cual contenía mayores requerimientos técnicos que se traducirían en un costo del proyecto superior al inicialmente establecido".

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El cuarto hallazgo se presenta en la revisión del reporte de las reservas presupuestales entregado por el Invías para las vigencias 2015, 2016, 2018 y 2019, en el que se configuran fallas del sistema de control interno del instituto, ya que los funcionarios a cargo debieron gestionar con antelación a la tesorería para la constitución de las reservas presupuestales dentro del término establecido.

El quinto hallazgo se relaciona con la justificación para las reservas de recursos en las vigencias 2015, 2016, 2017, 2018 y 2019, cuando se constituyeron un total de trece reservas presupuestales por un monto superior a los 377.000 millones de pesos.

Según la Contraloría, "los hechos evaluados han permitido evidenciar que las falencias han generado la constitución en exceso de reservas presupuestales por parte del Invías, lo que conlleva el riesgo de recorte de su presupuesto de inversión para adelantar o desarrollar a nivel nacional los proyectos de importancia estratégica que requiere el país y sus regiones".

El sexto hallazgo aparece en la facturación emitida por el contratista. De una cantidad revisada 107 facturas por 678.775 millones de pesos, el ente de contol encontró inconsistencias en el sistema de control interno de la respectiva unidad ejecutora del Invías, lo que genera errores por posibles imprecisiones en los datos registrados, que luego terminan en correcciones por ajustes o reclasificaciones en la siguiente vigencia.

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El séptimo y último hallazgo está relacionado con el uso de partidas de Bienes de Uso Público en Construcción a Bienes de Uso Público en Servicio Administrativo.
"Por tanto, es claro que al cierre de la vigencia de 2019, los saldos de los contratos de obra 0642/2015 por la suma de $731.146.282.511, y de interventoría 0644/2015 por valor de $41.720.519.168, quedaron contabilizados como parte del saldo de los Bienes de Uso Público en Construcción, subcuentas Red Carretera y Terreno, y no como Bienes de Uso Público en Servicio, subcuentas Red Carretera y Terrenos, teniendo como sustento que el contratista no ha terminado la ejecución de unas obras, sin que ello sea un factor limitante de peso o restricción significativa que impida la puesta en servicio y la operación del nuevo puente Pumarejo", afirma la Contraloría.

 

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