Los fabricantes de vehículos también se opusieron a la propuesta del Gobierno de subir las mezclas de biocombustibles en Colombia.
Están advirtiendo incluso que se puede poner en riesgo la llegada de nuevos vehículos al país y el cumplimiento de las garantías debido a que la mayor parte de los motores en Colombia están fabricados para operar con una mezcla de máximo 10% de biodiesel y así lo señalan expresamente las marcas en los manuales de funcionamiento.
El Ministerio de Minas propuso el aumento inmediato de las mezclas a un 12% en biodiesel y a un 7% de etanol en una resolución que fue publicada para comentarios del público pero que podría ser adoptada en los próximos días de forma oficial.
“Si yo le suministro (a mi vehículo) un combustible diferente a lo que el (fabricante) está diciendo y se identifica en el proceso de la garantía que el problema está relacionado con la dieta que le estoy dando al motor me rechazan la garantía. ¿Entonces quién la asume? El consumidor”, explicó el presidente de Andemos, Oliverio García.
Un consumidor al que le tocaría gastar más en cambio de filtros y reparaciones a las piezas del motor que entran en contacto con el combustible, así como en cubrir los daños a los sistemas de control de emisiones en los vehículos, según el gremio.
“¿Qué va a hacer el fabricante? Seguramente dice: dejo de despachar vehículos a Colombia porque ellos no van a seguir corriendo ese riesgo”, agregó García.
Andemos asegura que el Gobierno ya ha sido informado sobre la existencia de ese riesgo en diversas oportunidades.
Una limitación a la llegada de nuevos vehículos podría presionar aún más un mercado en el que los vehículos nuevos están tardando meses en llegar y el precio de los usados está disparado.
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