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En Chinchiná, Caldas, murió Marco, el perro que esperó durante seis años en las afueras del hospital municipal a su dueño. El animal desconoció que en el 2016 su dueño falleció tras ser internado.
El nombre del perro se lo puso la comunidad por el Hospital San Marcos y el animal se la pasaba en los andenes y zonas verdes del lugar, siendo reconocido por los comerciantes de la zona.
Cuando Marco empezó a enfermarse, María Gladis García lo llevó para su casa, pero “el perrito nunca se dejó encerrar”.
“Tuve que soltarlo (…) Lo encontramos (muerto) cerca a la casa. Yo pienso que el perrito se quería morir porque lo encontré echado en un pastal”, relató con tristeza a Noticias Caracol.
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