La mala hora del presidente Iván Duque en el Congreso

Al presidente Iván Duque no le fue nada bien en este primer periodo de sesiones en que, con su política de “cero mermelada”, ha intentado imponer un nuevo relacionamiento con el Congreso generando enormes fracturas entre ambos poderes.

Lo que es un hecho es que en el Congreso crece el malestar hacia el Gobierno y, aunque tienen opción de pasar, la reforma política, la ley de modernización al sector de las TIC y hasta la Ley de Financiamiento, están en la cuerda floja.

Y aunque algunos sectores culpan a los congresistas del mal momento que pasa el Gobierno, los parlamentarios justifican su falta de apoyo a la agenda del Ejecutivo en la relación distante que consideran ha establecido el mismo presidente Iván Duque.

En ese tema coincide el senador John Milton Rodríguez, de Colombia Justa Libres. “El Gobierno tiene que fortalecer sus lazos de comunicación. No podemos seguir simplemente discriminado al Congreso con conceptos de mermelada. Aquí ha faltado comunicación, coordinación, líneas claras sobre los distintos proyectos y en eso el Gobierno, con humildad, debe reconocer la necesidad de recomponer su estrategia de comunicación y su relación con el Congreso”, dijo.

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El congresista también reclamó ante la forma cómo han sido marginados los sectores que apoyaron la campaña presidencial de Iván Duque, a quienes el Gobierno no los reconoce en materia de representación.

“El Gobierno debe reconocer la necesidad de la participación y la representación en el gobierno de todos los sectores que apoyamos la candidatura de Iván Duque. Desconocer los sectores que estuvimos comprometidos en esa instancia sería el colmo. Nos interesa que le vaya bien al Gobierno porque si le va bien al Gobierno le va bien al país”, agregó.

Finalmente, el senador Santiago Valencia, del Centro Democrático, consideró que “los hechos hablan por sí solos” y que sí se ha buscado la participación de los congresistas en los proyectos, pero que “ha primado el interés político sobre el interés del país”.

“El presidente Duque lo que ha dicho es que tiene que haber un nuevo relacionamiento, se ha sostenido en su palabra, fue lo que dijo en su campaña, pero el Congreso no ha sabido responder a esa nueva dinámica”, concluyó.

En esa misma línea, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, explicó que espera que se pueda terminar a tiempo el trámite de los proyectos pendientes y consideró que “los debates permanentes en el Congreso han sido bastante productivos (…) algunas iniciativas han pasado, otras se aplazan, otras se hunden, pero esto ha sido un ejercicio democrático de cara al país, demostrando que hay una relación transparente entre el Gobierno y el Congreso”.

¿Es necesario un relevo en el gabinete?

A propósito del planteamiento que hicieron los senadores uribistas María Fernanda Cabal y José Obdulio Gaviria, desde Cambio Radical, el senador Carlos Fernando Motoa coincidió en que “debe el presidente Duque hacer cambios ya en su gabinete”.

“He visto en las plenarias de Senado defendiendo los proyectos del Gobierno, tal vez a la ministra del Interior, a la ministra de Justicia y a la directora del DPS, pero hay otros que no han pasado por las plenarias, que no se conoce su voz en las plenarias y que pareciera que están en una agenda propia sin defender el programa de Gobierno del presidente Duque”, dijo.

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Fuentes contaron a Blu Radio que esta semana el senador José David Name, presidente de la Comisión Quinta del Senado, tuvo un enfrentamiento con el ministro de Agricultura, Andrés Valencia, quien tendría interés en que no fuera aprobado un proyecto relacionado con apicultura y habría llamado a reclamar, en tono de regaño, al congresista.

Name advirtió al alto funcionario que el Congreso es autónomo en sus decisiones, sumado a que el Gobierno brilló por su ausencia en el debate y no envió concepto alguno para fijar su posición sobre el mismo.

En todo caso, a esta altura y a diferencia de lo que ha ocurrido con otros gobiernos, Iván Duque no ha logrado sacar adelante ninguna de sus más importantes reformas.

En enero próximo el Gobierno Nacional buscará lograr consensos en un nuevo intento por, de una vez por todas, lograr una coalición, de lo contrario, su gobernabilidad estará cada vez más debilitada y con una desaprobación de más del 60 por ciento.