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Desde el pasado viernes 17 de julio, cuando entró en vigor en Cali la ley seca y el toque de queda nocturno, la Policía Metropolitana de la ciudad intervino para interrumpir 144 celebraciones que con escándalos y excesivo ruido alteraron la tranquilidad y la convivencia en diferentes barrios de la ciudad.
El secretario de seguridad de Cali, Carlos Rojas, dijo que, aunque este fin de semana hubo menos indisciplina social, 650 personas fueron sancionadas con multas por incumplir las medidas de toque de queda y la ley seca.
siguen siendo un factor de riesgo para la propagación del COVID-19.
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En una de las fiestas desactivadas durante el puente festivo en Cali participaron más de 200 personas, la mayoría menores de edad.
Por esta razón el personero municipal, Harold Cortez, pidió a las autoridades sancionar a los padres de familia que permitan que sus hijos menores participen de este tipo de eventos que violan todas las medidas sanitarias.
Escuche este informe completo aquí:
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