BLU Radio hizo un recorrido por el hospital de campaña de Providencia , el único que ha prestado este esencial servicio a los raizales desde que pasó el huracán Iota hace un año. Actualmente atienden a pacientes que se complican tras contraer COVID-19, en medio de este pico de contagios.
En seis carpas color beige, que podrían soportar hasta una tormenta tropical, funciona hoy el único centro médico de Providencia. Todas las urgencias son atendidas en este lugar que instaló la Defensa Civil horas después del paso del huracán Iota. Las carpas que fueron fabricadas en Francia tuvieron que ser transportadas en avión y luego en buque a Providencia.
En el hospital de campaña se atienden desde las heridas por accidentes de los trabajadores de las obras que avanzan en la isla, hasta consultas prenatales, infecciones urinarias y otras patologías. Solo cuando se necesita de una unidad de cuidado intensivo el paciente es trasladado vía aérea a San Andrés, como ha pasado en este pico con varios enfermos de COVID-19.
El coronel Néstor Raúl Espitia, subdirector de la Defensa Civil, contó que la carpa para pacientes con complicaciones por COVID-19 tiene un sistema de ventilación especial, un generador de aire acondicionado independiente que hace que el aire que circula al interior de la carpa no salga y que también esté renovado constantemente.
En estas carpas funcionan las unidades de Urgencias, Admisiones, Hospitalización para seis personas nada más, Odontología, Laboratorio, Centro de Operaciones y la carpa acondicionada para pacientes que tienen complicaciones de COVID-19.
A nivel de hospitalizaciones tiene capacidad para seis pacientes, unidad de hombres, de mujeres y en caso de necesitarse más unidades, deberán ser trasladas a San Andrés.
En este hospital se han hecho más de 27.000 atenciones en el último año, lo que significa que cada isleño ha pasado por lo menos cuatro veces por allí, ya que providencia tiene un promedio de seis mil habitantes.