Baja la tormenta por fotos erradas en el informe de Duque ante la ONU: opinión de Ricardo Ospina

La tormenta originada tras los errores en varias fotografías publicadas en el 'dosier' que el presidente Iván Duque llevó a Naciones Unidas para demostrar la relación entre el régimen de Nicolás Maduro y grupos guerrilleros colombianos, lentamente se va calmando.Lea también: ¿Quién es responsable del error en dosier del presidente? AnálisisA eso han contribuido la renuncia presentada por el general Oswaldo Peña, jefe de inteligencia y contrainteligencia del comando general de las Fuerzas Militares, quien en un hecho atípico en Colombia, asumió la responsabilidad de lo ocurrido, y las voces de respaldo de Estados Unidos y de la OEA.El general Peña es un curtido oficial de inteligencia, que entre otras cosas tiene en su historial la operación que llevó a que finalmente fuera abatido alias ‘Guacho’, el temible cabecilla de las disidencias de las Farc en Nariño, y fue el coordinador del equipo que preparó la documentación para el presidente Duque en relación con las pruebas que vinculan a Maduro con el ELN, las disidencias y otros grupos delincuenciales.En la tarde de ayer se conocieron comunicados desde la embajada de Estados Unidos en Colombia y desde la Organización de Estados Americanos, que sirvieron como un bálsamo para el gobierno, que la había pasado muy mal desde cuando se conocieron las dudas sobre varias fotos, que se presentaron en el dosier como pruebas de la presencia de grupos ilegales colombianos en Venezuela, cuando todo indica que fueron tomadas en Colombia y fueron conseguidas por Internet.Y mientras baja la tormenta quedan muchas preguntas por resolver, entre otras quién incluyó las fotos en el dosier, sobre todo teniendo en cuenta que muchos de los elementos contenidos en el documento eran sólidos y contundentes, basados en fuentes humanas, con circunstancias de modo, tiempo y lugar, que por sí solos hubieran servido para el propósito del presidente Iván Duque en la ONU.Otra pregunta que queda es si con la cabeza del general Peña queda superado el asunto o si el presidente tendría que hacer más ajustes en su círculo cercano, para evitar vergüenzas como la que tuvo que pasar en Nueva York.Escuche aquí la editorial de Ricardo Ospina, en Mañanas BLU