Quedan muchas dudas luego del increíble caso de sicariato que este jueves, a la una de la tarde, afectó la tranquilidad de quienes almorzaban en plazoleta de comidas en la Gobernación de Cundinamarca.
¿Por qué mataron a Luis Carlos Castillo Amaya, un hombre de 63 años de edad, quien desde hacía 7 años y medio trabajaba en el área técnica de la dirección de rentas de la Secretaría de Hacienda de Cundinamarca?
¿Cómo logran los sicarios que mataron a Castillo, ingresar un arma de fuego a un edificio estatal, ubicado a muy pocas cuadras del Ministerio de Defensa, de la embajada de Estados Unidos y de la Fiscalía?
Amaury García Berrocal, alias "Niche", el presunto asesino, ¿actuó como sicario contratado por enemigos del señor Castillo en Bogotá o en Facatativá, donde residía?
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¿Por qué si la justicia sabía del perfil criminal de Amaury García, solamente recibió una condena a 4 años de cárcel por parte de un juez especializado de Montería?
¿Cuáles fueron los nuevos delitos por los que García Berrocal había sido condenado a 14 años de cárcel recientemente por un juzgado de Villavicencio?
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¿La presencia en Bogotá de García Berrocal, reconocido jefe de sicarios del Clan del Golfo en Valencia Córdoba, debe preocupar a las autoridades ante la llegada en firme de la violencia de ese cartel del narcotráfico a la ciudad?
¿Quiénes son los dos cómplices de alias Niche que lograron escapar del edificio de la Gobernación de Cundinamarca en medio de la confusión del atentado?
Hay muchas preguntas y preocupaciones tras este episodio, pues además de que debe esclarecerse quién ordenó matar a Luis Castillo, las autoridades tienen el deber de explicar a la ciudadanía qué tan fuerte es la presencia de estas oficinas de cobro criminal en la ciudad.
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