Desde la mañana de este jueves, el Área Metropolitana de Bucaramanga y la Dirección de Tránsito, realizan controles en diferentes puntos de la ciudad con el fin de verificar que los buses no estén circulando con una capacidad mayor al 35% de pasajeros, la estipulada para mantener el distanciamiento social y evitar la propagación del COVID-19.
Durante los controles, que también realizan a taxis, las autoridades de tránsito revisan el cumplimiento de las medidas de bioseguridad.
“Estamos trabajando por el cumplimiento de las normas para entregarle también un mensaje a los pasajeros que se están movilizando en el transporte público, porque necesitamos de conciencia ciudadana para que el virus no se siga propagando”, manifestó Fabián Fontecha, subdirector de Transporte del Área Metropolitana de Bucaramanga.
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El llamado también es para que los ciudadanos eviten la utilización del transporte informal.