Cristiano, de 31 años, fue baja de última hora al no haber superado las pruebas que se le realizaron después del entrenamiento del lunes.
El internacional portugués arrastraba molestias en el muslo derecho desde el pasado miércoles, cuando se retiró en los instantes finales del partido ante el Villarreal (3-0).
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Así las cosas, pese a que Zinedine Zidane dijo en la rueda de prensa previa al partido que el jugador se encontraba "al cien por cien" ya que se entrenó con normalidad en los 15 minutos abiertos al público, pero Ronaldo no entró en la convocatoria.
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El club salió al paso de las informaciones de varios medios de comunicación españoles, que aseguraron que el portugués podría tener una rotura en el bíceps femoral que le haría perderse el resto de la temporada, y dijo que "no sufrió rotura".
Sobre el francés Karim Benzema, quien fue sustituido en el descanso por el canterano Jesé Rodríguez, el portavoz del conjunto 'blanco' confirmó que el jueves se someterá a pruebas para determinar el alcance de sus molestias.