Las autoridades allanaron la oficina de Rafael Uribe Noguera, el hombre que habría asesinado a la niña Yuliana Samboní, ubicada en la calle 64A con carrera 1 de Bogotá.
En la diligencia, fueron incautados cinco computadores en busca de pruebas que buscan determinar si detrás de este hecho hay una red de prostitución infantil.
Las cuentas bancarias de Uribe Noguera también están siendo verificadas para buscar si hay alguna transacción que compruebe la hipótesis de pederastia.
La oficina también sería confiscada, como se hizo con la camioneta y el apartamento del indiciado, donde fue asesinada la menor.
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