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Después de atender partos durante 60 años, el Hospital San Vicente Fundación de Medellín suspendió los servicios de maternidad desde el 31 de octubre.
Y aunque a diferencia de la clínica El Rosario de Villahermosa, donde desde el 1 de julio también fue cerrado el servicio de ginecobstetricia por problemas financieros, el Hospital San Vicente asegura que toma la decisión en vista de que sólo atienden el 4 % de los partos de la ciudad.
No obstante a las madres les preocupa que cada vez haya menos lugares para dar a luz en Medellín.
"Las madres que quedan hipertensas o que están sufriendo en el embarazo del azúcar", "Yo normalmente hacía los controles de ginecología acá de San Vicente, muy buena la atención", "muchas necesitamos ese recurso y si eso lo cierran hay muchas perjudicadas", señalaron algunas de las afectadas por el cierre a Blu Radio.
A esa preocupación se suma la de los trabajadores de la salud y asociaciones médicas de la ciudad que denuncian una masacre laboral en el el Hospital Alma Máter de Medellín.
En los últimos días, inesperadamente, al menos 20 trabajadores, entre médicos y enfermeros de la Unidad de Cuidados Intensivos y del servicio de hospitalización del Hospital Alma Máter en Medellín, recibieron sus cartas de despido.
En diálogo con Blu Radio, uno de los profesionales aseguró que aunque la institución justifica su decisión con los problemas financieros que atraviesa el hospital, no hubo previo aviso. Además, cuestionan que uno de sus compañeros haya sido retirado a las patadas por personal de seguridad de la institución.
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"Enviaron un correo electrónico y me mandaron un WhatsApp con la liquidación con la carta de despido firmada por el gerente y con una citación para una evaluación de Medicina Laboral de egreso y ya posteriormente me di cuenta que daba varios compañeros también los echaron", señaló.
Ante esta situación, Carlos Oliveros, internista del Hospital Alma Máter y miembro de la junta directiva de la Asociación Médica de Antioquia, cuestionó que los directivos del Hospital en vez de cobrarle a las EPS la plata que le adeudan esté prescindiendo del talento de los profesionales despedidos que, en el caso de la UCI, son indispensables.
"Amenazan con sacar a cuatro internistas que no nos están sobrando sacó a todos los médicos de UCI para reemplazarlo por estudiantes, poniendo obviamente en riesgo la vida del paciente porque estamos hablando de disgregar equipos de trabajo que vienen consolidados desde hace años", indicó Oliveros.
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Asociaciones sindicales y personal de la salud del Hospital Alma Mater alistan plantones y otras actividades en protesta a estas decisiones.
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