Luego de que el pasado 9 de septiembre una pareja homosexual denunciara ser víctima de discriminación en el centro comercial Nuestro Atlántico por parte de uno de los vigilantes de la empresa de seguridad privada Vipers, el juzgado promiscuo civil de Soledad falló en favor de los jóvenes.
En la decisión, el juez ordenó que el centro comercial Nuestro Atlántico y la Empresa de Seguridad Privada Vipers que “en adelante se abstengan de realizar actos de discriminación y adopten mecanismos efectivos y eficaces para manejar situaciones por exclusión sexual o de cualquier otra índole.
Pese a que la tutela fue a favor de la pareja víctima, Esteban Gallardo, uno de los afectados, manifestó que están inconformes, pues el togado no ordenó el restablecimiento de sus derechos.
Esteban Gallardo contó que él y su pareja se encontraban esperando para entrar a una sala de cine del citado centro comercial cuando fueron abordados por un vigilante vigilante, quien les solicitó que se retiraran de las instalaciones del lugar argumentando que “las muestras de afecto y amor estaban prohibidas”. Lo anterior, tras haberlos sorprendido dándose unos abrazos y demostraciones de cariño.
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