Desde el 22 de abril comenzaron a subir los contagios y muertes por coronavirus en Bucaramanga y Santander, lo cual prendió las alarmas entre las autoridades de salud.
El panorama no es nada alentador y más cuando la demanda de servicios médicos por problemas de salud asociados al COVID-19 ha crecido en un 58% durante mayo.
"Estamos en un momento critico, por eso debemos seguir activando los protocolos de bioseguridad y evitar concentraciones con desconocidos. Invitamos a los participantes de las marchas a que se realicen la prueba gratuita de COVID-19", afirmó Nelson Ballesteros, secretario de Salud de Bucaramanga.
El gobernador de Santander, Mauricio Aguilar, hizo un llamado a los ciudadanos para que respeten la fila en la vacunación.
"Junto a los entes de control y nuestra secretaría de salud, haremos seguimiento y control a estos casos para tomar acción en cualquier tipo de irregularidad", afirmó el mandatario.
Actualmente 745 pacientes con COVID-19 reciben atención en centros médicos de Santander.