Diana Obando nació en Bogotá, pero parece un animal de monte: medio esquiva, medio misteriosa. Su trabajo literario es igual, lleno de palabras que parecen traídas de escrituras sagradas. La literatura de Obando no pretende llegar como una flecha a un punto rojo, sino que parece una serpiente con alas revoloteando en lugares que no parecen reales, entonces cuando una la lee parece que me cubriera un manto precioso y oscuro donde los sentidos afloran en la piel y donde la belleza es de otra sustancia. En esta conversación con Obando hablamos de plantas y de armas romas que no hieren sino que unen. Ojalá esta charla les lleve a jardines nuevos.
La primera novela de Giuseppe Caputo publicada en el 2016, revive la historia de un "Padre e hijo viven en un barrio oscuro, sin faroles, a orillas del mar. Los acorralan la pobreza y la soledad, pero se tienen el uno al otro, con u amor tan profundo que parece bastar".
La historia del vallenato guarda secretos y anécdotas que aún no han sido contados, pero la historia del vallenato en la radio tiene una voz y un nombre propio: Carlos Melo Salazar.
Sus muestras mas antiguas son los danzarines aislados o en grupo que se encuentran en pinturas de la época Magdaleniense (aproximadamente 8000 años A.C.) o incluso auriñaciense (unos 15000 años A.C.) : sus actitudes y disfraces (a veces de animales) han permitido suponer que podía tratarse de hechiceros entregados a danzas mágicas o, cuando la pintura representaba un grupo, de cazadores o acaso de guerreros que evocan sus hazañas.
Cómo narrar lo que ha sido contado tantas veces. Cómo contar la historia de un hombre que también atravesaría la historia de un país. Hace cien años nació en Bogotá Álvaro Castaño Castillo. Su nombre sería escrito en decenas de premios, medallas y diplomas.