El abrazo de la serpiente enseña al mundo la Amazonía colombiana: Ciro Guerra

Cristina dijo que desde el momento en que se estrenó la película, en mayo de 2015, se pregunta por qué está por fuera del circuito del cine en Colombia. “Salimos a salas el 21 de mayo, en ese momento había crítica en todos los diarios internacionales, diarios nacionales, y para nuestra sorpresa salimos en ese momento con 26 salas, sabiendo que las películas grandes de Hollywood estaban saliendo con 750 salas; sentimos que hay una desprotección hacia el cine colombiano y películas alternativas, que tienen propuestas diferentes”. (Lea además: El abrazo de la serpiente, primera película colombiana nominada a los Óscar).

 
“Lo que sí supimos todo el tiempo es que el ‘boca a boca’ ha sido increíble, estuvimos 11 semanas en cartelera cuando la mayoría de películas colombianas pasan 2 o 3 semanas. Durante estos 8 meses no hemos parado de estar en cartelera en una sala, el Cine Tonalá, y a partir de la predominación pensamos que podríamos estar en otras salas”, añadió la productora. (Aquí:El abrazo de la serpiente, elegida mejor película del Festival de Cine de Lima).
 
Por su parte, el director Ciro Guerra confesó que tuvo que pellizcarse varias veces para creer lo que estaba pasando y contó que ‘El abrazo de la serpiente’ “invita al espectador a un viaje al corazón al Amazonas, a descubrir parte de su belleza y tragedia”.  Vea el trailer de El abrazo de la serpiente, primer película colombiana nominada a un Óscar.
 
“Para todos los cineastas colombianos lo que cambió las cosas fue una ley luchada y peleada por gente tanto del sector cultural como por cineastas y cuando se aprobó se dio la oportunidad de que Colombia tuviera su propio cine. Es una ley modelo, copiada por otros países, y vista como una de las mejores maneras de fomentar la cinematografía de un país”, dijo en referencia al apoyo del Fondo para el Desarrollo Cinematográfico al inicio del proyecto, que al final tuvo un coste total de 1,4 millones de dólares.
 
Agradeció también que durante el rodaje los indígenas de la región “permitieron filmar esta película en los lugares sagrados para ellos, que nos compartieron su conocimiento y nos permitieron compartirlo con el mundo”.
 
Ciro dedicó la histórica nominación de su película a Colombia, “literalmente es el país el que obtiene la nominación entonces es de todos los colombianos, lo queremos compartir en particular con las comunidades indígenas del Amazonas que nos abrieron las puertas para colaborar, nos permitieron hacer esta película en su lengua. Es muy significativo que la primera película colombiana que logra esto sea hablada en lenguas indígenas”.