Ante el plan que se reveló esta semana para atentar en contra de altos oficiales de la Policía Nacional, entre ellos el entonces director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, ahora en retiro, y el general Luis Eduardo Martínez, quien lideraba la operación Agamenón.
La defensa del general Martínez, el abogado Jaime Granados manifestó su preocupación por los problemas de seguridad, "la respuesta que recibe por sacrificio en primer lugar es sacarlo de la Policía en unos términos muy controversiales y en segundo lugar se conocen amenazas de muerte en las cuales se le ha puesto precio a su cabeza de él y otros oficiales activos", precisó el abogado defensor.
Aseguró que desde el presidente Álvaro Uribe Vélez han emitido oficios al Gobierno para que le brinden seguridad sin tener una respuesta positiva.
La alerta la prendió un informe de la Dijín de la Policía Nacional, tras la captura de un agente de la Interpol quien estaría vendiendo información a la red criminal del 'Clan Úsuga'.
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