La Conferencia Episcopal hizo un llamado a desactivar los focos de violencia que se han desatado en las principales ciudades del país durante las protestas del paro nacional .
Lo primero que manifestaron los altos jerarcas de la iglesia es que la protesta pacífica es un derecho, pero que rechazan los hechos de violencia, el vandalismo y las agresiones que han escalado en amplias regiones del país.
La iglesia católica expresó su “profundo dolor” por las 19 muertes y los 800 heridos que han dejado las extenuantes jornadas de manifestaciones en el país.
“¡Qué se detenga, por el bien de todos, la espiral de violencia y el círculo de muerte que se están impulsando! Es momento de emprender juntos la tarea de generar un modelo de desarrollo humano integral”, dice el comunicado.
Asimismo, rechazaron las violaciones a los derechos humanos, “sea cual fuese su proveniencia”, pero también la violencia vandálica, los bloqueos a la movilidad que han traído desabastecimiento en Cali y otras ciudades.
Por eso, la Iglesia hace un llamado a detener la violencia invocando la reconciliación con la participación de la ciudadanía con “valentía y perseverancia”.