Piedad Córdoba,fue una abogada y política nacida el 25 de enero de 1955 en Medellín. Desde sus inicios en el Partido Liberal, Córdoba dejó una huella por su compromiso social y su lucha por la paz en medio de un conflicto armado en Colombia.
Graduada como abogada de la Universidad Pontificia Bolivariana, Córdoba se destacó tempranamente por su carácter progresista. Su ascenso en la política local la llevó a ocupar cargos significativos en la administración municipal de Medellín, convirtiéndose en la mano derecha del alcalde William Jaramillo.
Córdoba elegida como concejala y posteriormente como representante a la Cámara y senadora, consolidándose como líder política.
Fue secuestrada por las Autodefensas Unidas de Colombia en 1999, y tras exiliarse en Canadá, regresó al país para continuar su trabajo político.
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Trayectoria política de Piedad Córdoba
Córdoba se inició como líder comunal en los barrios de Medellín, al lado del dirigente William Jaramillo. Entre 1984 y 1986 ocupó su primer cargo público, fue subcontralora municipal de su ciudad. En 1991 fue elegida representante a la Cámara de Representantes por Antioquia, y en 1998 fue elegida senadora de la República.
En el Senado, Córdoba se destacó por su defensa de los derechos humanos y la paz. Fue una de las principales impulsoras de los diálogos de paz entre el gobierno colombiano y las FARC, y jugó un papel clave en la liberación de varios secuestrados por parte de la guerrilla.
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En 2009, Córdoba fue destituida de su cargo de senadora por la Procuraduría General de la Nación, tras ser acusada de tener vínculos con las FARC. Sin embargo, fue absuelta en 2011 por la Corte Suprema de Justicia.
En 2018, Córdoba fue elegida senadora por el partido Colombia Humana, liderado porGustavo Petro. En el Senado, continuó trabajando por la paz y los derechos humanos.
Córdoba murió en Medellín el 20 de enero de 2024, a la edad de 68 años. Su muerte fue un acontecimiento muy comentado en Colombia, y su legado sigue siendo objeto de debate.
Legado
Piedad Córdoba fue una figura controvertida, pero también una de las políticas más influyentes de Colombia en las últimas décadas. Su legado es complejo y abarca tanto sus logros como sus errores.
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Por un lado, Córdobaes reconocida por su defensa de los derechos humanos y la paz. Fue una de las principales impulsoras de los diálogos de paz entre el gobierno colombiano y las FARC, y jugó un papel clave en la liberación de varios secuestrados por parte de la guerrilla. Su trabajo en este campo le valió el reconocimiento internacional, y fue galardonada con el Premio Nobel Alternativo en 2008.
Por otro lado, Córdoba también fue acusada de tener vínculos con las FARC, y fue destituida de su cargo de senadora por la Procuraduría General de la Nación en 2009. Estas acusaciones, que Córdoba siempre negó, le valieron un daño irreparable a su reputación.
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