Sin poder “pegar el ojo”, así se encuentra María Cecilia Mercado, habitante del corregimiento de Altavista, occidente de Medellín, luego de que en la noche de este sábado las aguas de la quebrada La Picacha hicieran estragos en su vivienda.
“Todos nos inundamos, las casas se colapsaron mucho, sobre todola de nosotros que las paredes se rajaron. A la vecina se le llevó la casa”, aseguró Mercado.
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De las catorce viviendas que recibieron la orden de evacuar, dos colapsaron por completo y doce más se encuentran en riesgo. Sin embargo, sus habitantes se niegan a evacuar pues aseguran que no tienen dónde albergarse.
Entre tanto, en Vigía del Fuerte, 15 comunidades se encuentran afectadas por la creciente del río Murrí, que destruyó dos viviendas y afectó parte de los cultivos.
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