¿Carros autónomos reemplazarían a los conductores?

Las pruebas que se están haciendo alrededor del mundo en cuanto a los automóviles autónomos tuvo un obstáculo este año luego de que en Tempe, Arizona, un carro sin conductor de Uber arrollara a una mujer de 49 que desafortunadamente horas más tarde murió.Edwin Bohórquez, gerente digital de El Espectador, habló para La Nube sobre estos tipos de vehículos que buscan mejorar la calidad de conducción a través de avances tecnológicos que permitan que los automóviles se manejen de manera autónoma.“La autonomía del vehículo está dada por el humano, es un tema de comportamiento humano, somos quienes tomamos las malas decisiones de atravesarnos cuando no debemos”, explicó Bohórquez, haciendo referencia a que estas nuevas formas de conducción buscan en primer lugar mejorar los problemas de accidentalidad que diariamente se ven en las carreteras del mundo.Un gran debate se ha presentado en cuanto a estos nuevos adelantos tecnológicos que han realizado grandes empresas como Uber, Google y Tesla Motors, quienes se han destacado por mantener constantes pruebas para que la conducción autónoma tenga menos errores cada día.“Se trata de que se sigan haciendo pruebas, se siga estructurando este modelo de negocio que va revolucionar la industria. Para que se llegue a escenarios que sean tan entendidos desde la planificación, que cuando el carro esté andando solo, se pueda reconocer que ese era un escenario posible que se podía dar”, comentó.Vea aquí: Vehículos autónomos ayudarían a reducir accidentes de tránsitoAdemás, se habla también de la posibilidad de que las máquinas puedan llegar a reemplazar a las personas, algo que, según Edwin Bohórquez, no tiene cabida en los nuevos avances, por el contrario, los humanos empezarán a pensar más en cómo hacer que las máquinas sean más productivas.“Va haber un desplazamiento y los humanos vamos a empezar a pensar más en cómo hacer que las maquinas sean más productivas”, explicó.“En EE.UU. se cuentan más de 40 mil accidentes al año por temas de conducción, pero en un año son dos o tres por vehículos autónomos; obviamente nos asusta cuando empezamos a conocer lo desconocido. El debate está en si las máquinas están en la capacidad de aprender de los impases que van pasando”, finalizó.