
Colombia es un país de una belleza inagotable, lleno de paisajes que cautivan a viajeros durante todo el año, ya sea en busca de descanso o de aventura.
En el corazón de La Guajira, se encuentra uno de esos tesoros ocultos: los pozos y cascadas cristalinas de Montes de Oca, alimentados por las puras aguas de los ríos Jordán y Carraipía.
Este es un destino perfecto para los amantes del turismo ecológico, de conservación, de avistamiento de aves y de respeto por la naturaleza.
Así es Montes de Oca en La Guajira
En el extremo norte de la Serranía del Perijá, entre los municipios de Maicao y Albania, se esconde uno de los secretos mejor guardados de Colombia: la Reserva Natural Montes de Oca.

Este paraíso natural, situado en el departamento de La Guajira, abarca 27 km² de una biodiversidad asombrosa, con altitudes que oscilan entre los 200 y 800 metros sobre el nivel del mar.
Montes de Oca no solo es un refugio para más de 250 especies de plantas y animales, sino también un santuario espiritual para la comunidad indígena Wayuu, quienes consideran estas montañas vitales para su subsistencia y su conexión ancestral con la tierra.
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El área deslumbra con más de 13 cascadas, cuyas aguas cristalinas adoptan un tono azul mágico gracias a su pureza y origen en los ríos Jordán y Carraipía. Aunque solo un par de estas caídas de agua son aptas para el baño, su contemplación es una experiencia que parece sacada de un sueño.
Para los amantes del ecoturismo, Montes de Oca ofrece oportunidades incomparables para el senderismo y la observación de aves. Con cerca de 177 especies aladas, junto al 15 % de los mamíferos del país y más del 60 % de los anfibios y reptiles de la costa Caribe, es un verdadero laboratorio vivo de biodiversidad.
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Cómo llegar a Montes de Oca
Desde Santa Marta, Barranquilla o Riohacha puedes tomar un bus directo a Maicao. Desde allí, un trayecto de 20 minutos por carretera te lleva a este paraíso escondido.